Brota la vida con muy poco en la comunidad de Santa Bakhita
Diario Jaén ha viajado con Edad Dorada Mensajeros de la Paz Andalucía a Kenia, a un orfanato y a su escuela en la región de Machakos, que recibe ayuda de gente anónima de Jaén y que necesita pupitres.
Diario Jaén, 30-oct-2023
por Juan Espejo González
Es un bullicio Kenia, da igual en la montaña que en la sabana, en las ciudades que en los poblados; hay vida, mucha vida en este país africano que conocemos por los safaris y donde la pobreza, también es endémica. Pero sobre todos los adjetivos de la inmensidad de un país estable políticamente y lleno de contrastes porque tiene desiertos y grandes lagos, hay que quedarse con su alegría de vivir.
A valorar siempre unas infinitas ganas de ser felices con lo mínimo que tienen, a considerar que cuando no se tiene nada lo último que se puede perder es la sonrisa y ellos nunca la pierden: “Hakuna matata» el estribillo de la famosa película de dibujos animados. «El Rey León», llevada al máximo extremo: «No hay problema», sería su traducción, vive y deja vivir podría ser la moraleja final de un cuento real como la vida misma que no tiene final feliz.
O sí, porque desde Jaén llega puntual la ayuda y el aliento a un Orfanato y una Escuela llamada Santa Bakhita (monja mártir de Sudán, el país vecino) y 15 niños huérfanos cuentan con el calor de la monja fundadora del centro, la madre Josefina y su equipo de trabajo, y 90 niños reciben educación para el día de mañana poder ser lo que quieran pese a su condición social y sin importar donde viven, entre Ekalakala y Mutuu, donde la sequía está siendo catastrófica comparada con nuestra falta de lluvias.
Hasta ese rincón del África, a un paso del yihadismo y la barbarie, por Somalia y Etiopía, Uganda y Sudán, ha viajado Diario JAÉN con un grupo de jiennenses a los que invitó a acompañarle el presidente de Edad Dorada-Mensajeros de la Paz Andalucía, Julio Millán. Conoce de largo a la madre Josefina, keniana de nacimiento, por su estancia en conventos de Andalucía y Extremadura, y tras su vuelta a Kenia a poner en marcha el proyecto, inició una campaña de solidaridad a favor de semejante gesta humana, acoger a niños huérfanos y darles educación y alimento, para que Jaén colabore con el aliento económico necesario para que Santa Bakhita se sostenga.
La experiencia ha durado una semana, con un médico (Ricardo), un bancario (Santi), una administrativa (Paz), una empresaria (Ana) y un periodista (quien suscribe estas líneas) conformando la expedición solidaria al corazón pobre de Kenia. El puente de afecto y cariño será ya eterno entre este grupo tan dispar y los niños y las niñas huérfanas de Santa Bakhita. Estas páginas del reportaje de «La Semana» son una muestra de cómo viven y cómo comen, con qué juegan y de qué color de esperanza es su mirada.
Pupitres hechos con palets
Tiene 90 niños el Colegio de Santa Bakhita, con una frase que preside las clases: «Con Dios nada es imposible» y en todas ellas, los pupitres son de madera, pero con una diferencia con respecto a los antiguos pupitres españoles, son pupitres de palets reciclados y convertidos en ‘monumentos’ a la educación y el aprendizaje de los niños pobres de la zona. Este es el objetivo inmediato de la organización que preside Julio Millán, dotar de pupitres a la Escuela y para ello iniciará en breve una campaña de sensibilización en Jaén, que incluso puede abarcar también un grupo electrógeno y placas solares para el centro, en el que los niños del orfanato conviven en el vallado con animales que dan carne, leche y huevos para su alimentación diaria.
Los testimonios
Julio Millán Medina. Presidente de Edad Dorada-Mensajeros de la Paz Andalucía: «Le hacemos mucho bien a mucha gente; hemos venido un grupo de gente de Jaén a conocer y a echar una mano»
Ricardo Cobo López. Médico de Jaén: «La pobreza, aparte de ser muy atrevida, merma la salud. La alimentación es mala y tienen un descontrol enorme; los fármacos son pésimos y no llegan a ellos, abandonan el tratamiento porque no tienen recursos para acceder a ellos»
Benedetta Ngami Kiok. Directora de la escuela de Itangine: «Somos un centro religioso donde se les inculca a los niños ser responsables, la amistad, el respeto y la tolerancia, saber compartir y, sobre todo, conocer y amar a Dios»
Francis Mutiso Wambuas. Primer universitario del orfanato: «Para mí, Santa Bakhita es mi casa, mi hogar, donde lo tengo todo, porque desde el primer momento conté con el apoyo que necesito para crecer, para ser un hombre maduro y responsable»
Josphat Kyalye Sila. Alcalde de Ndalani Location: «Estoy muy contento con la expedición española porque han venido a ayudar y se agradece con el corazón. Santa Bakhita es un ejemplo para todos»
Josefina Mwikali Ndambuki. Directora del Centro de Santa Bakhita en Kenia: «Santa Bakhita sale de una pasión de dentro por rescatar a los niños más desfavorecidos, como son los huérfanos que se quedan con las abuelas, que dependen del campo y el campo no da buena cosecha; niños huérfanos de madres solteras que mueren, doble problema. De ahí nace querer ayudar a esos niños para que tengan un futuro mucho mejor y tener en la vida algo que les haga sonreír. La ayuda de Jaén está siendo inmensamente importante para el centro, porque gracias a Edad Dorada- Mensajeros de la Paz, los niños tienen tres comidas al día, tienen buena salud porque comen bien y nos quita la preocupación de qué comeremos. Además -sonríe- tenemos a El Abuelo con nosotros, ya es parte de nuestra familia; comienzan nuevos milagros para nuestro centro, muchas gracias a quienes nos han aportado tanto»
Ana Belén Molina Chamorro. Empresaria de Martos: «Emilie me ganó antes de venir. Tengo que dar las gracias a Julio Millán por darme esta oportunidad, por permitirme viajar hasta Kenia. Vi un video de Emilie y cuando vine era su ‘mami de Spain’; su mami del cielo la tenía, pero no la conocía. Me ha enseñado muchísimo más de lo que yo le he podido dar. Emilie, Anastasia, Tobías, Pepe, me han robado el corazón. Son todos niños maravillosos que, por no tener, no tienen ni familia; lo que han hecho aquí por ellos es digno de admiración»
Un trono de El Abuelo
Presidió una misa oficiada por el padre Julio Millán: nos referimos a un cuadro de Nuestro padre Jesús Nazareno, El Abuelo, y Diario JAÉN, representado por su director, Juan Espejo, en la expedición, regaló también al orfanato una pequeño trono de la imagen más venerada de Jaén.
Un país de contrastes que vive del turismo y la ayuda internacional
Kenia es un poco más grande que España, con 5 millones de habitantes más. Su principal foco de riqueza es el turismo, con un cuidado especial, por encima del entorno de países que lo rodean, sobre la sabana africana y los animales salvajes. Dada su precaria situación económica y el nivel de pobreza, la ayuda internacional es también parte importante del Producto Interior Bruto de una de las democracias más estables del continente. Es Kenia un país de contrastes, lleno de etnias y tribus, aunque la más conocida por Occidente sea la «masai». No hay más que observar con detalle la fotografía para comprobar cómo se viaja y cómo se vive, en consecuencia, en la Kenia de 2023.